lunes, 17 de marzo de 2008

Aviones II

“… y rogamos a los señores pasajeros que antes de descender controlen no olvidar ninguno de sus (d)efectos personales en el avión”

Yo creo que los defectos los traje todos conmigo (mezclados con alguna que otra virtud). Lo que si dejé por allá son algunas mochilas que, a estas alturas del viaje, ya me andaban pesando un poco. Por las dudas no les puse etiqueta con mi nombre. No vaya a ser que aparezca algún alma generosa, de esas que nunca faltan, y se le ocurra devolvérmelas.

2 comentarios:

emd dijo...

las mochilas que pesan siempre hay que dejarlas por ahí, por supuesto...

para qué seguir cargando!!

Maria Belen dijo...

q bien te hizo este viaje entonces.
alegrome! bienvenida L.